Francisco pide a los católicos que "abran el corazón a grandes ideales, a cosas grandes” y les convoca a rezar hoy 11 de mayo para que haya personas que entreguen su vida a Dios. Desde hace 51 años, ese día la Iglesia celebra la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones.
Francisco aconseja a quienes se interrogan sobre su vocación que no tengan miedo. "Dios sigue con pasión y maestría la obra fruto de sus manos en cada etapa de la vida. Jamás nos abandona. Le interesa que se cumpla su proyecto en nosotros, pero quiere conseguirlo con nuestro asentimiento y nuestra colaboración”, escribe Francisco.
Y les da otro consejo: les a "participar con confianza en un camino comunitario que sepa despertar en vosotros y en torno a vosotros las mejores energías”.