miércoles, 12 de febrero de 2020
EXHORTACIÓN A´POSTÓLICA POSTSINODAL-QUERIDA AMAZONIA DEL PAPA FRANCISCO
https://www.romereports.com/2020/02/12/texto-completo-de-la-exhortacion-apostolica-postsinodal-querida-amazonia-del-papa-francisco/
CONCLUSIÓN
LA MADRE DE LA AMAZONIA
111.
Después de compartir algunos sueños, aliento a todos a avanzar en
caminos concretos que permitan transformar la realidad de la Amazonia y
liberarla de los males que la aquejan. Ahora levantemos la mirada a
María. La Madre que Cristo nos dejó, aunque es la única Madre de todos,
se manifiesta en la Amazonia de distintas maneras. Sabemos que «los
indígenas se encuentran vitalmente con Jesucristo por muchas vías; pero
el camino mariano ha contribuido más a este encuentro».[145] Ante la
maravilla de la Amazonia, que hemos descubierto cada vez mejor en la
preparación y en el desarrollo del Sínodo, creo que lo mejor es culminar
esta Exhortación dirigiéndonos a ella:
Madre
de la vida, en tu seno materno se fue formando Jesús, que es el Señor
de todo lo que existe. Resucitado, Él te transformó con su luz y te hizo
reina de toda la creación.
Por eso te pedimos que reines, María, en el corazón palpitante de la Amazonia.
Muéstrate
como madre de todas las creaturas, en la belleza de las flores, de los
ríos, del gran río que la atraviesa y de todo lo que vibra en sus
selvas. Cuida con tu cariño esa explosión de hermosura.
Pide a Jesús que derrame todo su amor en los hombres y en las mujeres que allí habitan, para que sepan admirarla y cuidarla.
Haz
nacer a tu hijo en sus corazones para que Él brille en la Amazonia, en
sus pueblos y en sus culturas, con la luz de su Palabra, con el consuelo
de su amor, con su mensaje de fraternidad y de justicia. Que en cada
Eucaristía se eleve también tanta maravilla para la gloria del Padre.
Madre,
mira a los pobres de la Amazonia, porque su hogar está siendo destruido
por intereses mezquinos. ¡Cuánto dolor y cuánta miseria, cuánto
abandono y cuánto atropello en esta tierra bendita, desbordante de vida!
Toca la sensibilidad de los poderosos porque aunque sentimos que ya es tarde nos llamas a salvar lo que todavía vive.
Madre
del corazón traspasado que sufres en tus hijos ultrajados y en la
naturaleza herida, reina tú en la Amazonia junto con tu hijo. Reina para
que nadie más se sienta dueño de la obra de Dios.
En ti confiamos, Madre de la vida, no nos abandones en esta hora oscura. Amén.