Catedral de Yokohama, dedicada el "Sagrado Corazón"
Sac. SVAGR José Nepomuceno de Tyncany (ex Checoslovaquia, hoy República Checa), muerto en Claypole en 1969, a 83 años de edad, 15 de profesión y 12 de Sacerdocio. Estudio ingeniería en la Universidad de Praga, viajando luego por Rusia y los Estados Unidos. Después de la muerte de su esposa se trasladó a Argentina donde conoció y admiro a las obras de Don Orione y a sus hijos espirituales.
Deseoso de consagrarse al Señor en el ejercicio de la caridad, entró a formar parte de la Pequeña Obra a la edad de 66 años.
18 Necrológico de la Provincia Religiosa “Nuestra Señora de la Guardia” (Obra Don Orione) dedicó el último periodo de su vida al servicio de los pobres del Pequeños Cottolengo de Claypole, de que fue emérito arquitecto. Sacerdote y religiosos ejemplar, ha dejado en sus hermanos y en cuantos lo conocieron sobre todo el recuerdo de su sencillez y su piedad.
Recordando al querido Padre Jan Nepomuceno Svagr: + 26-03-1969
Nacido en Checoslovaquia y se laureó de ingeniero civil en la Universidad de Praga. Fallecida su esposa viajó a Argentina donde conoció, se enamoró de la Obra de Don Orione y quiso ser parte de ella. Recibió la ordenación sacerdotal cuando contaba algo más de 70 años de edad. El último periodo de su vida lo transcurrió entre los pobres del Pequeño Cottolengo de Cláypole.
Durante ese periodo el Padre Jan Nepomuceno Svagr planificó y construyó el Templo dedicado a San Luis Orione. Con algunas dificultades. La singular arquitectura hizo difícil la eliminación de todas las fisuras que permitían el goteo del agua. Para cerrar las angostas ventanas, en vez que el tradicional vidrio transparente, utilizó planchas acrílicas de diferentes colores: toda una novedad.
La dirección del Cottolengo y los dormitorios de algunos religiosos activos estaban ubicados en el primer pabellón sobre la derecha, al final de la doble hilera de pinos que conformaban la larga alameda de ingreso a la propiedad. El lugar de encuentro de la comunidad (capilla y comedor) era “el Hogar sacerdotal” ó Residencia, a una distancia aproximada de cien metros. Allí, a las seis de la mañana se reunían todos los religiosos para las oraciones de regla.
Cierto día de invierno estuvo de paso el Padre Gaetano Piccinini, Consejero General de la Congregación, que nos acompañó en las prácticas religiosas. Como buen observador que era, no pasó desapercibida la llegada puntual a la capilla, del anciano sacerdote. Su figura diminuta estaba totalmente envuelta en una manta oscura que lo defendía del intenso frío y de la espesa húmeda neblina invernal. El paso algo apurado y el humilde porte del religioso casi octogenario, sorprendió al visitante.
Después de las oraciones vocales, el visitador se acercó al altar y, después de habernos saludado, exordió diciendo: “Hoy he comprendido la parábola del viñador que manda pagar primero a los obreros de la última hora, porqué la intensidad vale más que la cantidad”. Siguió todo un elogio del vetusto religioso checo.
APORTE: Padre Pietro Ferrini Vicini