Es cierto: hoy ¡no tenemos un centavo para la construcción!
Pero es un muy buen signo.
Será la Providencia a seguirnos ayudando; ¡como lo viene haciendo hasta ahora y como lo hizo siempre!
... Porque, "si el Señor no construye la casa, como afirma el Salmo 127, en vano se cansan los constructores".
¡Cuento con tu oración y ayuda para lograrlo!
¡Hay mucha gente que quiere ayudar! ¿les comentarás de nuestro proyecto?