SABÍAS ?

MOVIMIENTO LAICAL ORIONITA BARRANQUERAS

SABES LO QUE SIGNIFICA MLO? SIGNIFICA MOVIMIENTO LAICAL ORIONITA

¿ Y SU ORIGEN? :

El MLO tiene su origen en Don Orione el cual durante toda su vida, ha comprometido a los laicos en su espíritu y misión para "sembrar y arar a Cristo en la sociedad".

¿Quiénes integran el movimiento?
Todos aquellos laicos que enraizados en el Evangelio, desean vivir y transmitir el carisma de Don Orione en el mundo...

¿Cuál es el fìn del MLO?

Es favorecer la irradiación espiritual de la Familia orionita, más allá de las fronteras visibles de la Pequeña Obra.
¿Cómo lograr esto?

A través del acompañamiento, animación y formación en el carisma de sus miembros,respetando la historia y las formas de participaciòn de cada uno.

¿Te das cuenta? Si amás a Don Orione, si comulgás con su carisma, si te mueve a querer un mundo mejor, si ves en cada ser humano a Jesús, si ves esa humanidad dolorida y desamparada en tus ambientes, SOS UN LAICO ORIONITA.

¿SABÍAS?
El camino y las estructuras del MLO, se fueron consolidando en las naciones de presencia orionita. Al interno del MLO y con el estímulo de los Superiores Generales , se juzgó maduro y conveniente el reconocimiento canónico del MLO ... así fue solicitado como Asociación Pública de Fieles Laicos, ante la Congregación para la vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCVSA) y fue aprobado el 20 de noviembre de 2012.

Y BARRANQUERAS, SABÉS DONDE QUEDA? en el continente americano, en América del Sur, en ARGENTINA, y es parte de la Provincia del CHACO.

Algunas de las imágenes que acompañan las diferentes entradas de este Blog pueden provenir de fuentes anónimas de la red y se desconoce su autoría. Si alguna de ellas tiene derechos reservados, o Ud. es el titular y quiere ser reconocido, o desea que sea quitada, contacte conmigo. Muchas gracias


miércoles, 13 de noviembre de 2024

1 er DÍA, AQUÍ ESTOY... (Lc 1, 30-38).




 

14 NOVIEMBRE

ITINERARIO Y REFLEXIÓN COMO CIERRE DEL AÑO ORIONITA.

1er DÍA

A LA LUZ DEL EVANGELIO

AQUÍ ESTOY. QUE SE CUMPLA... (Lc 1, 30-38).

 LA PALABRA DEL PAPA

María está en oración, cuando el arcángel Gabriel viene a traerle el anuncio a Nazaret. Su “he aquí”, pequeño e inmenso, que en ese momento hace saltar de alegría a toda la creación, ha estado precedido en la historia de la salvación de muchos otros “he aquí”, de muchas obediencias confiadas, de muchas disponibilidades a la voluntad de Dios. No hay mejor forma de rezar que ponerse como María en una actitud de apertura, de corazón abierto a Dios: “Señor, lo que Tú quieras, cuando Tú quieras y como Tú quieras”. Es decir, el corazón abierto a la voluntad de Dios. Y Dios siempre responde. ¡Cuántos creyentes viven así su oración! Los que son más humildes de corazón, rezan así: con la humildad esencial, digamos así; con humildad sencilla: “Señor, lo que Tú quieras, cuando Tú quieras y como Tú quieras”. Una oración sencilla, pero es poner nuestra vida en manos del Señor: que sea Él quien nos guíe. Todos podemos rezar así, casi sin palabras. (Papa Francisco, Audiencia general, miércoles 18 de noviembre de 2020).

 

LA PALABRA Y LA VIDA DE DON ORIONE

No basta amar, honrar a la Virgen con cantos y alabanzas: debemos honrarla, imitarla en sus virtudes, en sus prerrogativas: así nuestro amor será verdadero y mereceremos su ayuda, su patrocinio, no sólo para nosotros, sino para las almas que se nos confían. Prometamos ser verdaderos devotos de María, esforcémonos por imitar sus virtudes: humildad, pureza, caridad, santidad de vida. Pongamos en María Santísima, nuestra Madre celestial, toda la confianza, la mayor confianza, y dirijámonos continuamente a Ella y descansemos tranquilos en sus manos inmaculadas. Seamos sinceros devotos de la Santísima Virgen, imitando sus virtudes con la ayuda divina, observando cada vez con mayor empeño la ley de su Hijo, Redentor y Dios nuestro, Jesucristo. (DOLM, p. 1999).

 

Rezamos con Don Orione

Salve, oh Madre amantísima, que ves y oyes incluso desde lejos.

Recibe mi saludo, humilde, reverente, filial; siente el ferviente latido de este corazón

¡que traspasa los mares y llega a tu corazón!

Exulta, oh alma Donna del Cielo, ¡y acepta mi agradecimiento por tus muchas bendiciones y maravillas! Te invoco, te suplico por mí y por todos,

«¡Oh Virgen, oh Señora, oh Toda Santa!

A tus pies pongo mi corazón y toda mi pobre vida:

¡mil veces te bendigo, mil y mil veces te amo!

(DOLM III p. 1739).