Escrito perteneciente a la hna María Jesús Nieva, que acompañó al MLO Barranqueras, como asistente espiritual.
Queridos Amigos del MLO:
Deo Gratias!
Ciertamente este mes de octubre es un mes
significativo para el MLO por cumplirse un nuevo aniversario del Encuentro en Rocca di Papa,
considerado como el nacimiento del Movimiento
Recordemos que toda la teología sobre el laicado del Vaticano II confluye en dos afirmaciones básicas:
a) Los laicos son miembros de la Iglesia en idéntica igualdad y responsabilidad que los demás miembros: «Existe una auténtica igualdad entre todos en cuanto a la dignidad y a la acción común a todos los fieles en cuanto a la edificación del Cuerpo de Cristo» (LG, 32,2).
b) A los laicos les corresponde como miembros de la Iglesia una función propia y específica: «Los laicos están especialmente llamados a hacer presente y operante a la Iglesia en aquellos lugares y circunstancias en que sólo puede llegar a ser sal de la tierra a través de ellos» (LG, 33).
Desde los comienzos, Don Orione, en el proyecto educativo de su primer colegio, primero en San Bernardino y luego en Santa Clara, compromete enseguida a los laicos, sean personas importantes como el maestro de música de la Catedral de Tortona Giuseppe Perosi y sus hijos: el futuro cardenal Carlo, el gran músico Lorenzo y el maestro Marziano, sea gente más humilde para los servicios de la casa o de la cocina, como el cocinero Pasqualone.
La apertura de Don Orione hacia los laicos, para incitarlos al apostolado en forma directa y comunitaria, está testimoniado en los primeros años por la institución de las “damas de la Providencia”, en Turín.
Y hasta los últimos años de vida Don Orione a menudo está rodeado de laicos: el abogado Boggiano Pico, el ingeniero Marengo, el general Beaud, el conde Ravano, el senador Cavazzoni, el profesor Isola, el maestro Gaspare Rocca, confirmado en el compromiso laical, también a través de cartas. Y pocos meses antes de morir Don Orione predicó un retiro en Villa Sorari de Génova del 11 al 13 de noviembre de 1939 a un grupito de laicos, entre los que estaban el ingeniero Guala, el abogado Castillo y los entonces estudiantes universitarios Terzi y Zambarbieri.
Don Orione en la primera reunión de sus sacerdotes del 2 al 4 de septiembre de 1912 había decidido: “Cada Casa debe tener la Asociación de los Antiguos Alumnos” y pensaba invitarlos a todos a Tortona en 1913, cuando debía volver a tomar posesión de la casa de San Bernardino.
La primera gran guerra impidió aquel encuentro, pero en 1920, para sus 25 años de sacerdocio, Don Orione quiere convocar su primera asamblea para agradecer juntos al Señor. Hará lo mismo para su 40 aniversario, cuando Don Orione reúna alrededor de sí, antes de partir para América, sus chicos del' oratorio San Luis, de San Bernardino, del Santa Clara, del Paterno, además de los de los institutos de Noto, de San Remo, de Cuneo y de las otras casas de la obra, el 27 de mayo de 1934, en el gran encuentro general de fundación de la Asociación de Ex Alumnos. Desde entonces sus objetivos fueron fijados: vivir la vida cristiana y ser apóstoles, actuar los ideales del fundador, de fidelidad a la Iglesia, al Papa y a los Obispos, y de servicio a los pobres. En síntesis: compartir su carisma.
Por eso, en este mes tan especial, quiero alcanzarles mis saludos, oraciones y gratitud por querer intentar vivir y llevar a todos los ámbitos por los cuales se mueven, el TESTIMONIO DE LA CARIDAD ORIONITA.
Un abrazo grande a todos.
Hna. María Jesús Nieva.