"Nuestra vocación es la de los ángeles; adorar a Jesús,
para que cuando vayamos al cielo, vamos a cambiar sólo el reclinatorio ... Aquí
abajo adoramos en la fe, ...". Fue
la primera Superiora de las Hermanas Sacramentinas ciegas, la que encarna los ideales y la
formación que Don Orione quería para esta rama contemplativa. Murió en Tortona
(Alessandria) el 6 abril de 1964. Está
enterrada en la cripta del Santuario de la Virgen de la Guardia en Tortona.
En 1916 tuvo una entrevista con San Luis Orione , que la
orientó en la vocación de las Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad,
fundadas por él, fue confirmada en 1917. Tomó el hábito con el nombre de Sor
María Sebastiana y se distingue por el
cumplimiento ejemplar y alegre.
Cuando, en 1927, Don Orione estableció la Familia Sacramentina , llegó en
primer lugar con tres hermanas, para ser parte de ella, con el nombre de Sor María
de la Encarnación . Don Orione le dijo:
"Te necesito y confío"; y la nombró Superiora. Esta tarea la absorbió
hasta el último de sus días, por el ejemplo y las enseñanzas y la preocupación
de una madre cariñosa. La confianza del santo fundador nunca fué decepcionada.
