SABÍAS ?

MOVIMIENTO LAICAL ORIONITA BARRANQUERAS

SABES LO QUE SIGNIFICA MLO? SIGNIFICA MOVIMIENTO LAICAL ORIONITA

¿ Y SU ORIGEN? :

El MLO tiene su origen en Don Orione el cual durante toda su vida, ha comprometido a los laicos en su espíritu y misión para "sembrar y arar a Cristo en la sociedad".

¿Quiénes integran el movimiento?
Todos aquellos laicos que enraizados en el Evangelio, desean vivir y transmitir el carisma de Don Orione en el mundo...

¿Cuál es el fìn del MLO?

Es favorecer la irradiación espiritual de la Familia orionita, más allá de las fronteras visibles de la Pequeña Obra.
¿Cómo lograr esto?

A través del acompañamiento, animación y formación en el carisma de sus miembros,respetando la historia y las formas de participaciòn de cada uno.

¿Te das cuenta? Si amás a Don Orione, si comulgás con su carisma, si te mueve a querer un mundo mejor, si ves en cada ser humano a Jesús, si ves esa humanidad dolorida y desamparada en tus ambientes, SOS UN LAICO ORIONITA.

¿SABÍAS?
El camino y las estructuras del MLO, se fueron consolidando en las naciones de presencia orionita. Al interno del MLO y con el estímulo de los Superiores Generales , se juzgó maduro y conveniente el reconocimiento canónico del MLO ... así fue solicitado como Asociación Pública de Fieles Laicos, ante la Congregación para la vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCVSA) y fue aprobado el 20 de noviembre de 2012.

Y BARRANQUERAS, SABÉS DONDE QUEDA? en el continente americano, en América del Sur, en ARGENTINA, y es parte de la Provincia del CHACO.

Algunas de las imágenes que acompañan las diferentes entradas de este Blog pueden provenir de fuentes anónimas de la red y se desconoce su autoría. Si alguna de ellas tiene derechos reservados, o Ud. es el titular y quiere ser reconocido, o desea que sea quitada, contacte conmigo. Muchas gracias


jueves, 19 de marzo de 2015

SAN JOSE EN LA VIDA DE DON ORIONE !!!!

¿Sería San José en persona?”
En una ocasión de gran necesidad, la Congregación fue ayuda por un “misterioso hombre”, quien Don Orione interpreto que era el mismo San José.

Por ello, como signo de agradecimiento, en muchas casas de la Congregación, la imagen de San José tiene un pan en el cuello.

Don Orione estaba siempre escaso de dinero y con frecuencia eso le creaba no pocas angustias, especialmente en los primeros tiempos de su apostolado, cuando tenía tantos niños a los cuales quitar el hambre... Pero la Providencia intervenía.

Aquí está la narración de una de estas intervenciones, recogida de los labios mismos de Don Orione.

“Estábamos entonces (marzo de 1900) en el antiguo Convictorio paterno, en el Santa Chiara, y eran años de gran trabajo y también nuestros jóvenes estudiaban bien y rezaban bien (...). En momentos en los cuales no teníamos pan, no teníamos nada, fue San José el que vino a nuestro encuentro. Pero sólo este año parecía que el querido San José no quería venir a ayudarnos.

Llegó el mes de marzo, y estábamos muy necesitados de dinero: eran momentos muy penosos, y nos encomendábamos mucho a San José, que es invocado como administrador, mejor como proveedor de las casas religiosas, así como fue proveedor de la sagrada Familia. Y verdaderamente, también con nosotros, demostró siempre ser un buen proveedor... Venía a animarnos en esta devoción un santo y culto canónico, Mons. Novelli: nos confortaba, entonces, a esperar bien, a confiar en la ayuda de San José, en aquellos difíciles momentos, y a orar. El portero, entonces, era nuestro Zanocchi, luego superior de nuestras casas de América: entonces él no era ni siquiera clérigo, porque había llegado hacía pocos meses; para probar la virtud de este joven, para experimentarlo, lo puse a hacer de portero.

Estábamos, entonces, en el mes de San José. Y en lugar de venir las ayudas, venían los acreedores para hacerse pagar. Yo no me podía librar de ellos, mientras Mons. Novelli me decía siempre que confié.

Un día estábamos precisamente sin nada. Era la novena del santo: ¡más aún la antevíspera de la fiesta! Pero San José parecía que no nos quería ayudar. Pero he alli, se presenta en nuestra puerta un señor: yo estaba arriba y este señor pregunta: “¿Dónde está el Superior?” Y el portero sube a la carrera y me dice: “Hay un señor que desea hablarle”. “¿Pero quién es? ¿Es un acreedor?” “No lo conozco”. “¿No es el carnicero? ¿el lechero?”. “No lo sé”. “¿No dijo si es el del arroz o el de la sal?” “No lo sé”. “¿Es el muchacho de la Señora Chiesa?”. Se trataba de dar, me parece, a esa proveedora algunos miles de liras. “¿No lo has visto nunca?”. “No lo he visto nunca”. “¡Está atento de que no sea un acreedor!”... Éramos entonces unos doscientos.

Parecía una fatalidad: un acreedor detrás del otro; salía uno, entraba el otro. No creía que ese hombre no era también un acreedor: pero no se podía reparar, había que ir. De hecho bajé. Las puertas del colegio de entonces estaban precisamente en ángulo recto con la puerta de nuestra casa aquí, de la casa madre. Recuerdo con precisión esto: bajo las escaleras apurado y me encuentro delante de un señor modestamente vestido y con una barbita rubia. Ese señor me dice: “¿Ud. es el Superior? ¡Aquí hay una suma!”, y sacó un grueso sobre.

Esto lo recuerdo como si hubiese sucedido esta mañana. Entonces, como se hace habitualmente, le pregunté si debíamos celebrar algunas misas: “¿Hay obligaciones? ¿Hay alguna beneficencia que hacer?”. “¡No, no!”, respondió. “No hay nada. Sólo seguir rezando!”. Yo no lo había visto nunca. Me miró un instante y, saludándome con una reverencia, partió rápidamente. Hubiese deseado detenerlo pero, no sé cómo, no tuve coraje de hacerlo: esa presencia y esas palabras me habían como encantado... Y, mientras salía, los que estaban presentes dijeron que el rostro de ese señor tenía un no sé que de celestial... Y entonces nos lanzamos de inmediato sobre sus pasos para ver donde iba.

Ese señor hizo algunos pasos; salió por la puerta, descendió el escalón, pero luego no se lo vio más, ni a la izquierda ni a la derecha, ni bajo los pórticos ni en la iglesia; en el patio estaban solo los jóvenes. Se mandó de inmediato a dos de ellos para buscarlo, pero fue inútil. Nosotros nos retiramos todavía más confundidos: tenía un aspecto no de hombre; había salido apenas y ya había desaparecido. Vino luego Mons. Novelli y se le narró lo que había sucedido. El dijo: “¡Es San José, es verdaderamente San José, que ha querido confortarlos!”. Nosotros, de verdad, creímos siempre que era San José. Pero a Mons. Novelli le expresé una duda: “Era demasiado joven, se presentaba demasiado joven con una barba un poco rojiza”.

Él me respondió: “Pero San José no debía ser viejo, no era viejo. La iconografía lo presentó delante de las generaciones cristianas así, hizo de él un viejo, para hacer comprender más, para hacer sentir más la verdad que él no era el padre verdadero de Jesucristo, ¡sino sólo el padre putativo!”.

Ustedes, sin ánimo de ofenderlos, estarán ansiosos de saber cuánto dinero había en ese sobre: les bastará saber que había tanto como para pagar a los acreedores más urgentes y más grandes... Nosotros le estuvimos siempre agradecidos a San José.

EFEMERIDES ORIONITA HNO SILANES, 19 DE MARZO

EFEMERIDES ORIONITA
(Preparada por el Hno. Jorge David Silanes)

19 DE MARZO DE 1912
Don Orione, hace el IV voto y juramento de fidelidad al Papa en el Santuario de la Cadena en Cassano Jonio....

Terzi, Ignacio “Un vínculo...” pág. 36; Pap. pág. 199
19 DE MARZO DE 1922
Don Orione nombró al Padre Zanocchi, su representante en América.
Dutto, pág. 41 - 42.
19 MARZO DE 1924
Fundación de la primera sede del Cottolengo de Génova (La Casa de Caridad¬ para mujeres en Marassi de Génova)
D.O.P.H.M.C. pág. 303; Il Canonico pág. 212; Pap. pág. 292.
Se abre la Capilla y la Casa provisoria en el puerto de Mar del Plata, futuro Colegio y Parroquia Sagrada Familia, Don Orione se había comprometido a hacerse cargo del mismo cuando estuvo en el año 1922. El P. Montagna fue el primer Superior, que inició la vida del Colegio en un antiguo barracón, donde luego funcionaría una gran fábrica de conservas de pescado.
Almanaque 1944; Revista D.O. setiembre 1974; Dutto, pág. 80 - 81.
19 DE MARZO DE 1926
El P. Zanocchi, abre una imprentilla en un local del Colegio San José de Victoria (Bs. As.).
Almanaque 1944.
19 DE MARZO DE 1932
Se inaugura, cuando aún no estaba terminada, en Mar del Plata la iglesia de San José, será erigida en Parroquia en el año 1942.
Almanaque 1944; Dutto, pág. 81.
19 DE MARZO DE 1934
Es canonizado San José Benito Cottolengo, por Pío XI.
19 DE MARZO DE 1936
Don Orione en Victoria para la fiesta de San José
19 DE MARZO DE 1937
Es inaugurado y bendecido el Colegio José Manuel Estrada de Mar del Plata con la presencia y natural alegría de Don Orione, a quien sus hijos y bienhechores le ofrecen este presente con motivo de su venida.
Almanaque 1944.
19 DE MARZO DE 1940
Sepultura, de don Orione en el Santuario de la Guardia en Tortona.

19 DE MARZO, SAN JOSÉ !!!!!

Afirma Santo Tomás de Aquino que "hay tres cosas que Dios no podría haber hecho más sublimes de lo que son: la Humanidad de Nuestro Señor Jesucristo, la gloria de los elegidos y la incomparable Madre de Dios, de quien se dice que Dios no pudo hacer ninguna madre superior. Podéis acrecentar una cuarta cosa, en loor de San José. Dios no pudo hacer un padre más sublime que el Padre adoptivo del Hombre-Dios".

A lo que agrega  San Bernardo: "Ya que todo lo que pertenece a la esposa pertenece también al esposo, podemos pensar que José puede distribuir como le parezca los ricos tesoros de gracia que Dios confió a María, su casta Esposa".

Por amor de Dios Padre, Tú, San José, has sido llamado padre de Jesús y, unido a la maternidad espiritual de María, ahora también padre nuestro. A  ti consagramos nuestra vida y la misión que Dios nos ha encomendado. Te pedimos que intercedas por nosotros ante el Señor, que intercedas por la Santa Iglesia para su salvación, que intercedas en nuestra oración y la lleves a Dios. 
Tú, esposo de María, casto, justo, prudente y humilde, haz que estas virtudes, en ti gloriosas, afloren en nuestro espíritu y, para gloria de Dios, en el mundo. 
Haznos dulces y dóciles, tiernos y mansos con nuestro prójimo, especialmente con nuestros padres, hijos, familia y hermanos, no desde nuestra pequeñez sino desde Dios, dejando que Él sea en nosotros y nosotros en Él, que todopoderoso es. Amado San José enséñanos a desaparecer, como Tú que estás presente pero en Ti es sólo el Espíritu Divino el que permanece y Tú desapareces en el silencio del amor. 
Ruega para que en la presencia del Espíritu Santo, reconozcamos que sin Dios nada somos y nada podemos; ruega para que Dios obre en nuestro corazón como en el tuyo; ruega para que desaparezca nuestra pequeñez y aparezca tu grandeza, al reconocer nuestra debilidad en presencia de Su Amor. Por Jesucristo Nuestro Señor, Amén. 
Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo; como era en el principio ahora y siempre por los siglos de los siglos, Amén.

19 DE MARZO CONCLUYE LA SEMANA DE DESPEDIDA A DON ORIONE

DON STERPI, 19 MARZO FINALIZA LA DESPEDIDA A DON ORIONE

CATEDRAL DE TORTONA



MILAN, HOSPITAL MAYOR, UN NIÑO BESA EL FERETRO

MILAN 17 MARZO, CARDENAL SCHUSTER

PONTECURONE 17 DE MARZO

SANREMO 15 MARZO

DON ORIONE, HOY EN SANTUARIO MADONNA DELLA GUARDIA TORTONA