SABÍAS ?

MOVIMIENTO LAICAL ORIONITA BARRANQUERAS

SABES LO QUE SIGNIFICA MLO? SIGNIFICA MOVIMIENTO LAICAL ORIONITA

¿ Y SU ORIGEN? :

El MLO tiene su origen en Don Orione el cual durante toda su vida, ha comprometido a los laicos en su espíritu y misión para "sembrar y arar a Cristo en la sociedad".

¿Quiénes integran el movimiento?
Todos aquellos laicos que enraizados en el Evangelio, desean vivir y transmitir el carisma de Don Orione en el mundo...

¿Cuál es el fìn del MLO?

Es favorecer la irradiación espiritual de la Familia orionita, más allá de las fronteras visibles de la Pequeña Obra.
¿Cómo lograr esto?

A través del acompañamiento, animación y formación en el carisma de sus miembros,respetando la historia y las formas de participaciòn de cada uno.

¿Te das cuenta? Si amás a Don Orione, si comulgás con su carisma, si te mueve a querer un mundo mejor, si ves en cada ser humano a Jesús, si ves esa humanidad dolorida y desamparada en tus ambientes, SOS UN LAICO ORIONITA.

¿SABÍAS?
El camino y las estructuras del MLO, se fueron consolidando en las naciones de presencia orionita. Al interno del MLO y con el estímulo de los Superiores Generales , se juzgó maduro y conveniente el reconocimiento canónico del MLO ... así fue solicitado como Asociación Pública de Fieles Laicos, ante la Congregación para la vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCVSA) y fue aprobado el 20 de noviembre de 2012.

Y BARRANQUERAS, SABÉS DONDE QUEDA? en el continente americano, en América del Sur, en ARGENTINA, y es parte de la Provincia del CHACO.

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domingo, 20 de agosto de 2023

EL CATECISMO DE SAN PÍO X , PATRONES PREDILECTOS


 El catecismo es un breve y sencillo , escrito por el Papa San Pío X cuya primera edición data de 1905, con el importante objetivo de popularizar la enseñanza del Catecismo en la Iglesia católica y así hacer que los Católicos conozcan su fe y doctrina frente a lo que Pío X llama "la amenazante difusión de errores en los fatídicos tiempos modernos".Este catecismo, publicado inicialmente en italiano, adopta el clásico método dialógico de preguntas y respuestas 3 para exponer lo esencial de la doctrina católica, fortaleciendo por eso un conocimiento teológico básico para todos los católicos. Este método, aliado su "lenguaje claro y conciso", se tornó por eso mucho más adecuado a la formación de los jóvenes y adultos católicos del que el Catecismo Romano  (tenía también la función de resumir el Catecismo Romano, que fue un producto importante del Concilio de Trento). Supone este Catecismo una síntesis de otro Catecismo que escribió durante el Congreso Catequístico Nacional celebrado en Piacenza en 1889 cuando aún era el Obispo de Mantua. Ya en la Cátedra de San Pedro después de dos años, fue expuesto como una disciplina con la encíclica Acerbo Nimis y solicitada para la diócesis de Roma y que más tarde fue adoptado en toda la península itálica.

Ha recibido diferentes nombres este Catecismo, desde la canonización de Pío X por Pío XII en 1954, principalmente se le conoce como Catecismo de San Pío X. Hasta ese momento, su título original es Catecismo Mayor Compendio de la Doctrina Cristiana, más conocido como Catecismo Mayor en 1905 y como Catecismo de la Doctrina Cristiana desde la edición de 1912. En la edición de 1905, el Catecismo contaba con 993 preguntas y respuestas, mientras que en 1912 fue abreviado y corregido contando con 433 preguntas y respuestas además de publicarse con una carta adjunta escrita en términos solemnes, que le daba mayor autoridad y que según el Papa tenía ventajas sobre la anterior edición.4

Entre algunas diferencias de las ediciones, por ejemplo, en la de 1912 se especifica de forma escueta y rotunda que el Papa es infalible siempre que públicamente hable de doctrina incluso en el Magisterio Ordinario, sin dejar cabida a cualquier otra interpretación

  PATRONES PREDILECTOS

Escribía desde Buenos Aires:

"Hermanos míos muy queridos y amados, me parece escuchar las campanas de mi patria lejana que suenan a gloria por las ciudades y pueblos: su himno evoca en mí los más santos recuerdos: ellas cantan la resurrección de Cristo y me hacen llorar de fe, de alegría, de amor a Dios, de amor a ustedes, de amor a nuestra Italia".

Ordenó que en todas las casas de su Congregación hubiera una Biblia, la Suma de Santo Tomás, la Imitación de Cristo y el Dante. A los jóvenes alumnos escribía:

"Defiendan con valor el bien y la educación católica recibidos.

Difundan el espíritu de bondad: perdonen siempre: amen a todos; sean humildes, trabajadores,

francos y leales en todo: el mundo tiene suma necesidad de fe, de virtud, de honestidad".

Pero las palabras mejores las reservas para los pobres; mientras que las más duras las usa para sí mismo. Los pobres son sus "patrones predilectos", nuestros patrones. Decía así, pero en realidad eran su corazón.

"En la puerta del Pequeño Cottolengo argentino, a los que entren no se les preguntará cómo se llaman, sino solamente si tienen algún sufrimiento."

El mismo fue pobre. "Pobre sacerdote", como se califica una vez. Otra vez se dice un changador de Cristo. Estropajo, era una expresión que solía aplicarse a sí mismo y a los suyos.

De su vida escribe con una humildad y una dignidad que hace recordar a San Pablo:


"Sostenido por la gracia del Señor, he evangelizado a los pequeños, a los humildes, al pueblo, al pueblo pobre al que han envenenado con teorías perversas y arrebatado a Dios y a la Iglesia; en el nombre de la Divina Providencia he abierto los brazos y el corazón a sanos y enfermos, de toda edad, de toda religión, de toda nacionalidad: a todos habría querido dar, junto con el pan corporal, el divino bálsamo de la Fe, pero especialmente a nuestros hermanos que más sufren y están más abandonados.

Tantas veces he sentido a Jesucristo cerca de mí, tantas veces me pareció ver a Jesús en los más desdichados y los que están más abandonados".

Pero esto no le bastaba, y rezaba a la Virgen: "Vivir, palpitar, morir a los pies de la Cruz con Cristo.

Beatísima Madre, haz que tus pequeños hijos, los hijos de la Divina Providencia, tengan amor;

dales amor, ese amor que no es tierra sino fuego de caridad y locura de la Cruz.

Danos, María, un alma grande, un corazón grande y magnánimo que llegue a todos los dolores y a todas las lágrimas. Haz que seamos verdaderamente como nos quieres tú: ¡los padres de los pobres! Que toda nuestra vida esté consagrada a dar a Cristo al pueblo, y el pueblo a la Iglesia de Cristo; que arda y resplandezca de Cristo: y en Cristo se consuma, en una luminosa

evangelización de los pobres: que nuestra vida y nuestra muerte sean un cántico dulcísimo de

caridad, y un holocausto al Señor".

21 DE AGOSTO , SAN PIO X, PATRONO Y MODELO DE LOS CATEQUISTAS





SAN PÍO X, PATRONO Y MODELO DE LOS CATEQUISTAS 

La Iglesia Católica celebra cada 21 de agosto el Día del Catequista, en conmemoración del papa Pío X. Ese Papa, que fue santificado, tuvo actuación preponderante a favor de la catequesis e hizo posible entre otras cosas impartir los sacramentos a los niños. los catequistas no están guiados sólo por su buena voluntad, sino que tienen el mandato misionero para mostrar a todos en nombre de la Iglesia “el rostro misericordioso de un Dios que es siempre padre”.

El catequista se reconoce en búsqueda, en camino; no se cree ni dueño de la verdad ni el "maestro" que llega para esclarecer a los demás sino un instrumento que el mismo Jesús, presente en la comunidad, envía, sostiene y da fuerza para superar las oscuridades y dificultades.

Es parte de la gran marcha de creyentes que han recorrido y aún recorren la historia. Marcha que fue iniciada por el pueblo de Israel y ha continuado en la Iglesia y, a través de ella, ha llegado hasta nosotros.

El Papa Pío X ejerció su pontificado entre los años 1903 y 1914. Toda su actividad como Papa estuvo marcada por la importancia que dio a la catequesis y a la pastoral. Promocionó la comunión frecuente y dispuso las formas de preparación para que los niños accedieran al sacramento, redactó un catecismo, se ocupó de la formación del clero y de promover el canto litúrgico. También incentivó la organización de los distintos movimientos y asociaciones de laicos que por aquellos años comenzaban a surgir en la Iglesia.

Con todas estas iniciativas se estaban dando los pasos iniciales para que la catequesis, sobre todo la de preparación a los sacramentos, llegara a tener un lugar destacado en la Iglesia del siglo XX y que fuera ejercida no sólo por los sacerdotes y las religiosas, sino también por laicos.

De una familia pobre, humilde y numerosa, Giuseppe M. Sarto nació el 2 de junio de 1835 en Riese, Italia. En 1850 ingresó al seminario de Padua, y fue ordenado sacerdote el 18 de setiembre de 1858. Su primera labor pastoral la realizó en la parroquia de Tómbolo-Salzano, distinguiéndose, además de su gran caridad para con los necesitados, por sus ardorosas prédicas que atraían hasta los más alejados del mensaje del evangelio.

En 1884 fue ordenado obispo para la diócesis de Mantua y en 1893, León XIII le concedió el capelo cardenalicio y lo trasladó a Venecia. En ningún momento cambió su modo de ser: sencillo, muy humilde, ejemplar en el amor a los más pobres.

A los pocos años, al morir León XIII, fue elegido su sucesor y su "programa pontificio" no fue otro que el del Buen Pastor: alimentar, guiar y custodiar el "rebaño humano" y buscar a las ovejas perdidas para atraerlas hacia Jesús.

La preocupación de Pío X por la santidad de la Iglesia lo llevó a actualizar los seminarios y fundar numerosas bibliotecas eclesiásticas. También se lo recuerda por sus aportes a la música sagrada y a la liturgia y la reforma de la liturgia de las horas. Permitió la comunión diaria a todos los fieles y cambió la costumbre de la primera comunión: para que los niños pudieran recibirla a partir de los 7 años

Impulsó la enseñanza del Catecismo porque sabía que apartar de la ignorancia religiosa era el inicio del camino para recuperar la fe que en muchos se iba debilitando y perdiendo. Promovió un nuevo Código de Derecho Canónico que terminó de redactarse en 1917, bajo el pontificado de S.S. Benedicto XV.

Falleció el 20 de agosto de 1914, poco antes del estallido de la llamada "Primera Guerra Mundial". El 14 de febrero de 1923 se introdujo su causa de beatificación y fue canonizado el 29 de Mayo de 1954.

Indudablemente fue adoptado por la gente como patrono de los catequistas por su sencillez, sus raíces rurales que jamás dejó de lado y por su ardor misionero y evangelizador.