El 10 de enero de 1902,Don Orione tuvo una audiencia privada con León XIII. Quiso hacer partícipe de esta alegría a su obispo a quien le escribe diciéndole:
En vísperas
de arrodillarme a los pies del Papa para inclinarme a sus plantas consagrarme a
Él por entero, y consagrarle toda la Obra de la Divina Providencia, renuevo mi
profesión de amor filial…” Cuando se encontró ante el Papa, se arrodillo y le
presentó un escrito de puño y letra:
“Jesús,
Papa, Almas…
“Instaurar
todo en Cristo…
“El fin de
este Instituto es no solo preocuparse por la divina gracia por la cristiana
perfección de sus miembros, sino procurar la voluntad y la mayor gloria de Dios
y de su Santo Vicario en la tierra, el Papa, y su amor, con la práctica y el
sacrificio, con cada una de las obras de misericordia espiritual y corporal,
para divulgar y acrecentar el amor a Dios y el Papa, especialmente en el
corazón de los pequeños, los pobres, los afligidos por los diversos males y
dolores…” PAPASOGLI, o.c. pág. 113