SABÍAS ?

MOVIMIENTO LAICAL ORIONITA BARRANQUERAS

SABES LO QUE SIGNIFICA MLO? SIGNIFICA MOVIMIENTO LAICAL ORIONITA

¿ Y SU ORIGEN? :

El MLO tiene su origen en Don Orione el cual durante toda su vida, ha comprometido a los laicos en su espíritu y misión para "sembrar y arar a Cristo en la sociedad".

¿Quiénes integran el movimiento?
Todos aquellos laicos que enraizados en el Evangelio, desean vivir y transmitir el carisma de Don Orione en el mundo...

¿Cuál es el fìn del MLO?

Es favorecer la irradiación espiritual de la Familia orionita, más allá de las fronteras visibles de la Pequeña Obra.
¿Cómo lograr esto?

A través del acompañamiento, animación y formación en el carisma de sus miembros,respetando la historia y las formas de participaciòn de cada uno.

¿Te das cuenta? Si amás a Don Orione, si comulgás con su carisma, si te mueve a querer un mundo mejor, si ves en cada ser humano a Jesús, si ves esa humanidad dolorida y desamparada en tus ambientes, SOS UN LAICO ORIONITA.

¿SABÍAS?
El camino y las estructuras del MLO, se fueron consolidando en las naciones de presencia orionita. Al interno del MLO y con el estímulo de los Superiores Generales , se juzgó maduro y conveniente el reconocimiento canónico del MLO ... así fue solicitado como Asociación Pública de Fieles Laicos, ante la Congregación para la vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCVSA) y fue aprobado el 20 de noviembre de 2012.

Y BARRANQUERAS, SABÉS DONDE QUEDA? en el continente americano, en América del Sur, en ARGENTINA, y es parte de la Provincia del CHACO.

Algunas de las imágenes que acompañan las diferentes entradas de este Blog pueden provenir de fuentes anónimas de la red y se desconoce su autoría. Si alguna de ellas tiene derechos reservados, o Ud. es el titular y quiere ser reconocido, o desea que sea quitada, contacte conmigo. Muchas gracias


martes, 26 de enero de 2021

1RA PARTE EN CAMINO HACIA EL CENTENARIO , DEL LIBRO DON ORIONE LATINOAMÉRICA Y ARGENTINA EL SUEÑO DE SER MISIONERO, DE ENZO GIUSTOZZI

 




El primer viaje: 

Don Orione “descubre” el mundo latinoamericano (1921-1922)  (18)

1) El sueño de ser misionero, surcar los mares

Hacía tiempo que Don Orione quería visitar a los primeros misioneros que había enviado a fines de 1913, y que a partir de los primeros días de enero de 1914 19 trabajaban en Brasil. La primera guerra mundial (1915-1918) se lo había impedido, y había hecho difícil hasta la correspondencia epistolar. En 1918 una seria enfermedad volvió a frustrar sus intenciones de cruzar el océano

-           Sabes, Sterpi, que desde que estaba con Don Bosco, en Turín, siempre soñé con ser misionero, surcar los mares, evangelizar pueblos, atravesar ríos y selvas; y ahora un ángel “negro” el Obispo de Mariana, en el interior de ese inmenso país, Brasil, me llama a salvar almas desde su lejana tierra

-           ¡Eh, Padre!... de chicos todos soñamos con aventuras misioneras, pero ahora ya somos grandecitos y hay que ser prudentes y no querer dar el paso más largo que nuestras piernas... —replicó el P. Sterpi—.

El P Sterpi, mano derecha del Fundador, que corría detrás de Don Orione recogiendo y ordenando lo que la creatividad del Fundador desparramaba a manos llenas (a veces le parecía hasta medio desordenado e improvisador), sacudía la cabeza con cierto temor, porque ya preveía iniciativas impensadas, nuevas obras, más personal Y todo eso recaería sobre él. Se animó a agregar, con cierta osada timidez, casi en punta de pie, como era su estilo:

-           Pero usted sabe, Padre, que, en estos años, las cosas no han andado demasiado bien allá en Brasil. El Sr. Julio, quien se fue de la misión a los pocos meses de llegar, en 1914, el pobre Carlos Germanò, que con votos y todo, también terminó yéndose a lo de su hermano, y parece que ya se casó... En fin, me parece bien que usted vaya, lleve al P. Mario Ghiglione y al P. Camilo Secco como refuerzos, pero…

-           ¡Ah, Sterpi, Sterpi! ¿qué haría yo sin ti, sin tu prudencia, siempre alerta para dar un toquecito de freno cuando yo aprieto mucho el acelerador? Si Dios me dijese ‘te quiero dar un continuador que sea según tu corazón’, yo le contestaría: No hace falta, Señor, ya me lo diste en el P. Sterpi…”.

En 1921, al fin, Don Orione está listo para viajar hacia Brasil El día antes de la partida, el 3 de agosto, le escribía a todos los suyos:

“Hace sólo algunas horas que celebré la última Santa Misa a los pies de Ntra. Sra. de la Divina Providencia, en la Casa de Tortona, y ahora salgo hacia Brasil, adonde tenía pensado ir hace ya algunos años, para encontrarme con los Hijos de la Divina Providencia que la mano del Señor ha trasplantado allá.

Pero no puedo dejarlos, amados míos en Jesucristo, sin dirigirles una vez más una palabra de afecto paternal, sin mandarles un último saludo, una bendición muy especial

¡Sólo la caridad de Jesucristo salvará al mundo! ¡Debemos llenar con caridad los surcos de odio y egoísmo que dividen a los hombres!”

 El día siguiente, 4 de agosto, Don Orione se embarca en el buque “Principe di Udine”, llevando consigo a los sacerdotes Mario Ghiglione y Camilo Secco,  lo que hace pensar que además de reforzar la débil y problemática presencia de la congregación en Mar de Espanha, abrigaba proyectos de apertura y crecimiento

Ese día, como de costumbre, el puerto de Génova bullía de grandes transatlánticos, con sus altas chimeneas empenachadas de espeso humo negro; y se oían los roncos sonidos de las sirenas a medida que los barcos iban dejando el puerto arrastrados por minúsculos remolcadores hasta que, ya en mar abierto, se perdían en la lejanía hacia remotos destinos

Así también el barco “Principe di Udine”, salió de puerto y puso proa a Brasil, con sus tres misioneros a bordo 

 Don Orione en Brasil

El viaje fue más o menos tranquilo, con algo de mar picado en el Golfo de León, y 17 días después, el 20 de agosto, desembarcaban en Río de Janeiro.

El 19 de tarde llegaron a la vista de la ciudad, enmarcada en un espléndido escenario natural que dejaba boquiabiertos a los que lo contemplaban por primera vez

¡Miren qué belleza! —exclamó Don Orione, apoyado en la popa, junto a sus dos acompañantes— ¡Es un encanto! ¡De día, y más aún de noche cuando toda la ciudad está iluminada! ¡Es inmenso! 23

Y así, hasta bien entrada la noche, los tres se quedaron gozando del magnífico espectáculo, en muda contemplación, oración sin palabras, de alabanza al Creador de tanta belleza

A media mañana del sábado 20, desembarcaron En tierra los esperaban el sobrino Eduino Orione y el P De Paoli El domingo 21, Don Orione celebró la primera Misa en tierras latinoamericanas, en un orfanato de las Hermanas de la Madre Michel 24

Permaneció unos días en Río de Janeiro, allí visitó al Nuncio Papal, al Cardenal Alburquerque, y otras personalidades, en tratativas referidas a una institución que albergaba a 260 menores —la “Casa de Preservação” (un reformatorio)— y en la que se interesaban casi todas las autoridades mencionadas

Por fin, el 26 de agosto, viajan a Mar de Espanha, una población de unos 2500 habitantes, a la que llegan en dos días de viaje en tren

En carta a Mons. Cribellati, Obispo surgido de la Congregación, Don Orione describe así el pueblo y la región:

“Mar de Espanha es una pequeña ciudad de poco más de 2000 almas en el centro; es una bellísima pequeña ciudad, con una iglesia parroquial que desde el centro elevado domina todas las casas. También la iglesia es muy hermosa () La población está esparcida en pequeños pueblos, y la parroquia totalizará unos 10 ó 12000 habitantes () los pueblitos distan de nuestra parroquia de 12 a 16 kilómetros, que recorremos a caballo, binamos 25  los domingos, y cada pueblito tiene su capillita; tenemos 7 u 8 caballos que nos sirven para llevar los sacramentos e ir a los pueblitos 26

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  18           Del 4 al 20 de agosto de 1921, ida a Brasil; del 18 de junio al 4 de julio de 1922, regreso a Italia.

19            El P Genesio Poli, en su libro Don Orione e o Brasil (São Paulo, 1990), cuenta en la pág. 10: “... los primeros misioneros... eran: el P. Carlos Dondero que era director en San Remo, el Hno. Carlos Germanó y el Sr. Julio, despensero en el Instituto de San Remo, sin compromisos religiosos”. Agrega que este último, luego de unos meses en la misión se fue y nunca más se supo de él. A mediados de 1914, Don Orione envía al P. De Paoli como refuerzo y asistente de las Hermanas de la Madre Michel. Del Hno. Germanó, religioso con votos que también se fue; hay una carta de Don Orione a la Madre Michel, de junio de 1914 donde lo describe como un huérfano del terremoto, con votos religiosos, y le pide encarecidamente que trate de ir a Mar de Espanha: “Vea si puede hablar con el más joven de los tres: Carlos Germanò. Era un hijo mío querido, un huérfano calabrés que ahora tiene 22 años, Religioso nuestro y ya con los santos votos De las cartas de Dondero todavía no me queda claro que ya no esté allí. Pero si ya no estuviera, búsquemelo usted (apenas pueda) – y muéstrele esta carta mía y entréguele lo que le doy a usted expresamente para él” (3 de junio de 1914. Scritti 103, 21) El 14 de setiembre del mismo año le escribe al P. Carlos Dondero: “Me entero con gran dolor que Carlos ya no está con Uds. y le escribo que vuelva con Uds Y agrego la presente como carta de presentación ante Uds y de aceptación de parte mía y de parte de ustedes () (Scritti 103, 132) El 17 del mismo mes (Scritti 103, 133; cf G Poli, Os filhos de Don Orione no Brasil, 1985) le escribe al propio Germanò: “Recibí tu carta del 24 de agosto, ¡que me dio un profundo dolor! ¡No puedo expresar el disgusto que siento en el corazón! Había recibido tu primera carta, (...) Mi que rido Hijo, ¿por qué me quieres dar este dolor? Mi queridísimo Carlos, no abandones a Don Orione, que te ha querido y te quiere más que un padre” El joven se fue a lo de un hermano suyo que estaba en Brasil, luego se casó. Quizás hubiera aceptado volver a Italia, como le proponía Don Orione en varias cartas, hasta 1919; pero ya había empezado la guerra de 1914-1918.

  NdE: el diálogo referido es una recreación literaria realizada por el autor

  Carta circular desde Génova, dirigida “a los queridos Hijos de la Divina Providencia, sacerdotes, seminaristas, ermitaños, postulantes; a las Hermanas Misioneras de la Caridad; a mis bienhechores y bienhechoras; a los queridos huérfanos, a los ancianos internados, a los ciegos y a todos los jóvenes que se educan en las casas e institutos de la Providencia del Señor” (Scritti 62, 12)  Quien pasará años después a Argentina, donde falleció, el 10 de enero de 1958, y está enterrado en el cementerio del Cottolengo de Claypole

 

23 Cf. Carta al P. Sterpi del 18 de agosto, en navegación hacia Río de Janeiro (Scritti 14, 82 ss)

 24 Puede decirse que la Madre Michel (que ya había viajado a Brasil por primera vez en 1901) fue decisiva en la apertura de Don Orione a Brasil: “Y usted, Reverendísimo Padre, ¿cuándo vendrá a América?” (carta de 1904). Luego será Don Orione quien invite a la Madre Michel y sus religiosas a Argentina, hacia 1927.

25   NdE: La palabra “binar” indica que se celebra en el día una segunda Misa o más, por las necesidades del Pueblo de Dios

 26 Carta desde Mar de Espanha, del 28 de septiembre de 1921 (Scritti 28, 113)